La Habana.- Estados Unidos y Cuba alcanzaron un acuerdo para reanudar los vuelos comerciales regulares, impulsando las relaciones económicas que han languidecido a pesar de un año de rápido progreso en el frente diplomático, dijo un alto negociador de Cuba en la víspera del primer aniversario del deshielo entre los ex enemigos de la Guerra Fría.
El acuerdo alcanzado luego de tres días de conversaciones en Washington abre la vía para que aerolíneas estadounidenses negocien con el gobierno de Cuba rutas que podrían llevar a miles de visitantes más al día a la isla. El restablecimiento de los vuelos comerciales estadounidenses a Cuba tras medio siglo sería el mayor avance comercial desde que los dos países iniciaron la normalización de sus relaciones el año pasado.
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El Departamento de Estado dijo el jueves que el acuerdo permite iniciar los servicios aéreos programados y a la vez mantener los servicios de chárter que por ahora son los únicos vuelos directos entre Estados Unidos y Cuba.
Los equipos que se han estado reuniendo en la capital estadounidense "han obtenido avances importantes en la negociación de un memorándum de entendimiento sobre el establecimiento de vuelos regulares entre Cuba y los Estados Unidos, y en breve estarán en condiciones de darnos a conocer el anuncio de un acuerdo preliminar sobre este tema", dijo Josefina Vidal, jefa de asuntos de Norteamérica en el Ministerio del Exterior de Cuba, a reporteros en La Habana.
Avances
Estados Unidos y Cuba afirman públicamente estar encantados con el estado de las relaciones entre los dos países un año después de que el presidente de Cuba, Raúl Castro, y su homólogo estadounidense, Barack Obama, declarasen el fin oficial de las hostilidades. Desde entonces han reabierto sus embajadas en La Habana y Washington; acordaron un programa para restaurar el servicio de correo directo; firmaron dos acuerdo de protección medioambiental e iniciaron conversaciones sobre temas que van desde derechos humanos a compensaciones por las propiedades estadounidenses confiscadas por la revolución cubana.
Los secretarios estadounidenses de Estado, Comercio y Agricultura y el subdirector de Seguridad Nacional, nacido en Cuba, han realizado visitas oficiales para iniciar discusiones sobre asuntos técnicos poco atractivos pero vitales como inspecciones de productos y regulación portuaria.
La actividad deportiva y cultural está incrementándose también. La Habana se ha llenado de famosos estadounidenses. Varios promotores musicales se apuran para organizar el primer gran concierto de pop estadounidense en la capital insular el próximo año. Estrellas de las Grandes Ligas de béisbol, entre ellas los desertores cubanos Yasiel Puig y José Abreu, fueron recibidos con calidez por el gobierno cubano esta semana en un viaje de buena voluntad que busca abrir camino para celebrar juegos de preparación en Cuba en 2016.
Las relaciones comerciales, una parte importante de la nueva política de Obama para Cuba, no han registrado apenas avances. Cuando presentó esta iniciativa, el 17 de diciembre de 2014, Obama presentó una atractiva imagen de turistas utilizando tarjetas de crédito y débito gracias a nuevos vínculos entre bancos. Las empresas estadounidenses exportarían una amplia gama de productos, incluyendo equipos de telecomunicaciones.
Pero casi nada de esto se ha convertido en realidad.
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Sprint y Verizon han firmado acuerdos de roaming con la empresa estatal de telecomunicaciones de Cuba que solo benefician a una pequeña parte de viajeros estadounidenses adinerados. El servicio online de alojamiento en casas particulares Airbnb comenzó a operar en el país pero no permite reservas a clientes no estadounidenses, por lo que es irrelevante para la mayoría de turistas que proceden de Europa y Canadá.
"En el plano político, diplomático y de la cooperación bilateral se han registrado progresos importantes", apuntó Vidal. "En contraste, debo señalar que en el área económica y comercial los resultados son apenas visibles".
Los viajes entre Estados Unidos y Cuba crecieron más de un 50% desde el año pasado aunque, hoy en día, la única forma de volar entre los dos países es hacerlo en vuelos fletados que son complicados para reservar. Los turistas cubanos deben enfrentar largas y caóticas filas para comprar billetes en papel mientras que en Estados Unidos están obligados a enviar documentos e información de pago por correo electrónico a un agente de viajes ante la ausencia de servicios de reserva online.
La reanudación de los vuelos comerciales parece que impulsará el turismo en un país que con una infraestructura hotelera ya sobrecargada. Hoteles y hostales privados están reservados con meses de adelanto.
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Estos cambios hacen que muchos cubanos tengan una vida más acomodada, pero quienes siguen percibiendo bajos sueldos estatales y libran una lucha diaria encontrar productos escasos y caros manifiestan un creciente sentimiento de impaciencia y descontento.
"No se ha visto de verdad el comercio, no se han visto productos en las tiendas", dijo Paloma Suárez, una empleada de oficina de 50 años en una empresa estatal en La Habana Vieja.
Camino largo
Estados Unidos expresó su decepción por lo que califica de falta de voluntad de Cuba para cooperar con acciones ejecutivas como permitir exportaciones estadounidenses al sector privado cubano y ventas de equipos a la empresa estatal de telecomunicaciones. Vidal dijo que gran parte de la culpa está en la poca disposición del gobierno de Obama, hasta el momento, para tomar medidas audaces para aliviar el embargo comercial sobre Cuba.
"Hay solo muy pocas cosas que, por ley, el presidente de los Estados Unidos definitivamente no puede cambiar ", dijo Vidal, pidiendo a Obama que permita al gobierno cubano utilizar dólares en transacciones internacionales y que exporte bienes a Estados Unidos, entre otras medidas.
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Las empresas estadounidenses que buscan hacer negocios en la isla dicen que los burócratas dieron la bienvenida a sus propuestas en amistosas reuniones cara a cara, pero meses más tarde siguen sin recibir un "sí" o "no" claro.
En Estados Unidos, los bancos que temen entrar en conflicto con el embargo han estado bloqueando transacciones legales relacionadas con Cuba a tasas iguales o más altas que antes del anuncio de Obama. Y los negocios del país deseosos de lanzar proyectos en Cuba dicen que los reguladores federales responden a las peticiones de licencias con confusión o silencio.
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Funcionarios cubanos se han mostrado dispuestos a trabajar con Oggun, una pequeña empresa de Alabama que quiere construir tractores asequibles y fáciles de reparar para granjeros privados de la isla. La empresa cree que sus planes cumplen tanto con el texto como con el espíritu de la nueva política de Obama.
Apuntan que recibieron palabras de ánimo del Departamento de Estado pero que los reguladores financieros del Departamento de Tesoro congelaron su iniciativa.
"Todo lo que sabemos es 'su solicitud está pendiente''', dijo el cofundador de Oggun, Horace Cleber. "Han pasado seis meses y sigue en proceso".