La historia de Nepal está marcada por una serie de catástrofes aéreas a causa de una topografía compleja y un clima inestable, que hace del pilotaje una tarea difícil, aunque también hay fallas humanas.
Tras el peor accidente ocurrido el domingo en este país del Himalaya desde hace 30 años, AFP examina las causas de tantas catástrofes aéreas en Nepal:
"Nepal posee un terreno y un medio ambiente difíciles para el trabajo de una compañía aérea", declaró Shukor Yusof, del gabinete de consejo de aviación Endau Analytics, con sede en Malasia.
"Es muy difícil para cualquier piloto volar en esta parte del mundo. Algunos aviones deben ser especialmente concebidos para aterrizar en esas alturas", declaró a AFP.
Las montañas, especialmente en caso de mal tiempo, complican la tarea de los pilotos.
Nepal cuenta con 8 de las 14 más altas cumbres del mundo, entre ellas el monte Everest, lo que la hace un destino popular para los turistas y los alpinistas.
"Hay vientos muy fuertes. El tiempo cambia rápidamente, por lo tanto diría que es probablemente uno de los lugares más arriesgados del mundo para volar, simplemente a causa de la geografía, la meteorología y los desafíos que plantean", consideró Greg Waldron, redactor en jefe para Asia de FlightGlobal, revista especialista del sector.
Nepal posee algunas de las pistas más alejadas y más complejas del mundo, flanqueadas por cumbres nevadas cuya acercamiento es uno de los mayores retos aun para los pilotos más experimentados.
El pésimo mantenimiento de los equipos y la aplicación laxa de las reglas de seguridad afectan al sector del transporte aéreo nepalí.
La Unión Europea prohibió a todos los transportadores nepalíes de su espacio aéreo por razones de seguridad.
Según Shukor Yusof, Nepal tiene "antecedentes más bien dudosos" en materia de seguridad aérea.
"A juzgar por esos antecedentes, es claro que hay aun mucho margen para que mejoren", agregó.
El experto describe el avión ATR que se estrelló el domingo como un aparato que puede "operar en condiciones y terrenos difíciles".
Por el contrario, Greg Waldron
dijo que al ver un video que muestra los últimos instantes del vuelo, le pareció que una de las alas del avión repentinamente "entró en pérdida", es decir que perdió la capacidad aerodinámica de mantener la máquina en el aire.
"Cuando usted está a baja altitud y enfrenta un incidente como ese... es un problema muy serio", explicó.
Nepal obtuvo malos resultados en materia de investigación sobre los accidentes en una auditoría de la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI) el año pasado.
Según Gerry Soejatman, consultor en aviación con sede en Yakarta, la OACI constató que las autoridades nepalíes no ejercen un control riguroso adecuado y "no tienen la capacidad de aplicar eficazmente" las reglamentaciones y las normas.
"Respeta mal las directivas de la OACI respecto a las investigaciones sobre los accidentes, esenciales para determinar los problemas, suministrar recomendaciones con la finalidad prevenir y evitar futuros accidentes", explicó.
En 1992, un aparato de Pakistán International Airlines se estrelló al acercarse a Katmandú causando la muerte de sus 167 pasajeros, en el accidente aéreo más mortífero de la historia del país.
La más reciente catástrofe aérea había sido la del aparato de la compañía nepalí Tara Air en mayo pasado, con saldo de 22 muertos.
El control del tráfico aéreo perdió el contacto con el bimotor Twin Otter poco después de despegar de Pokhara en dirección de Jomsom, destinación popular para los escaladores.
Desde entonces las autoridades reforzaron la reglamentación, y los aviones están autorizados desde entonces solo a volar en condiciones meteorológicas favorables.
En marzo de 2018, 51 personas murieron y a 20 resultaron gravemente heridas en el accidente de un avión de la compañía Bangla Airlines cerca del aeropuerto internacional de Katmandú.
mba/axn/lth/cn/eg/mb