EscucharLa desaparición de Narumi Kurosaki, una japonesa supuestamente asesinada por el chileno Nicolás Zepeda, conmovió a Japón y supuso años de disputas legales con Chile. A continuación, un repaso a este caso que se juzga desde este martes en Francia.
Zepeda, un profesor ayudante e hijo de una familia chilena acomodada, conoce a la estudiante japonesa en 2014.
Un año después comienzan una relación durante la cual Kurosaki viaja a Chile para conocer a su familia.
Pero termina después de que ella se traslada a Francia en agosto de 2016 para estudiar en Besanzón (este).
Zepeda viaja a Besanzón para ver a Narumi Kurosaki, que entonces tiene 21 años, en diciembre de 2016.
La última que vez que se la ve es cenando con él en un restaurante próximo a Besanzón, el 4 de diciembre.
De madrugada, los compañeros de la residencia de estudiantes escuchan gritos y golpes procedentes de la zona de su habitación.
Pero su desaparición no se denuncia hasta varios días después. Durante ese tiempo, su exnovio, que en septiembre de ese año la había amenazado en un video publicado en internet y retirado posteriormente, regresa a Chile.
Zepeda admite haber ido a su habitación para mantener sexo, que describe como consentido, y asegura haberse marchado justo después.
El cuerpo de Kurosaki nunca apareció, a pesar de las intensas búsquedas, incluso en bosques cercanos.
Los fiscales dicen que Kurosaki inició una nueva relación en Francia, un hecho que "claramente exasperó" a Zepeda.
El ministerio público cree que la mató en un ataque de celos.
En el video le había dado un ultimátum de dos semanas para que se plegara a sus condiciones, no especificadas.
La investigación revela que se detuvo en un supermercado de camino a Besanzón a comprar cerillas, líquido inflamable y cloro.
Cuando Zepeda devolvió su auto de alquiler tres días después de la desaparición de Kurosaki, el vehículo estaba "muy sucio", con tierra en el lado del conductor y en el maletero, según un fiscal.
Durante varios días después de la desaparición, se siguieron enviando mensajes desde el celular de Kurosaki a sus amigos y familiares, incluidos mensajes en japonés.
Un amigo japonés de Zepeda dijo a la policía que le había pedido que tradujera frases al japonés, que luego aparecieron en uno de los mensajes enviados desde el celular de la joven desaparecida.
Poco después de la desaparición, Francia emite una orden internacional de captura contra Zepeda, pero un magistrado chileno desestima la orden de arresto en febrero de 2017.
En abril de 2019, una fiscal chilena interroga a Zepeda en presencia de investigadores franceses. Zepeda negó estar involucrado en la desaparición de Kurosaki.
En julio de 2020, es extraditado a Francia para ser interrogado sobre el caso. Poco después, es acusado de asesinato.
La entrega se retrasa por la pandemia de coronavirus y el consiguiente cierre de fronteras.
La familia de la joven japonesa expresa, por boca de su abogado, su esperanza en que Zepeda dirá la verdad.
En febrero de 2021, un juez francés ordenó que Zepeda sea juzgado por asesinato, en un proceso que comienza este martes. El chileno se enfrenta a la cadena perpetua.
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