El púgil Gabriel Escobar, la última esperanza de España por alcanzar su primera medalla olímpica en boxeo desde 2000, sufrió el martes una derrota ante el kazajo Saken Bibossinov duramente protestada por el equipo español.
"No entiendo la decisión, he hecho más por la victoria", dijo Escobar, entre indignado y abatido, en la zona mixta de la arena Kokugikan.
Actual campeón de Europa, Escobar cayó en un feroz combate de cuartos de final del peso mosca (48-52 kg) por decisión dividida (3-2).
Escobar fue el tercer español eliminado en cuartos, a una victoria de garantizar al menos una medalla de bronce.
Bibossinov se impuso en el primer asalto, en el que llegó a enviar a la lona a Escobar, en un feroz combate marcado por los constantes agarrones y los trepidantes intercambios de golpes.
El español consiguió rehacerse de su caída, ganó el segundo asalto y llegó con el marcador igualado hasta el último 'round', que se decidió en los últimos golpes.
"Me han dicho, 'vamos empatados'. Y ya a tirar, esto es morir encima del ring por España, por mi familia, por todo. Y no ha valido", lamentó.
Tras la última campana, Escobar se mostraba convencido de su triunfo y, tras escuchar el veredicto, bajó cabizbajo del ring hasta desplomarse en una de las sillas.
El equipo español se quedó así sin opciones de lograr la primera medalla olímpica del país en boxeo desde la plata de Rafa Lozano en los Juegos de Sídney-2000.
El propio Lozano, actual entrenador del equipo, expresó su indignación con las puntuaciones a su pupilo.
"Nos han quitado la medalla. Esta era nuestra medalla y la habíamos ganado", reclamó. "No es lo mismo una medalla que un diploma olímpico, a todos los niveles".
España se quedó también al borde del podio de Tokio con las derrotas en cuartos de Gazi Jalidov (peso mediano pesado) y de Enmanuel Reyes (peso pesado).
Reyes, nacido en La Habana y llegado a España en 2017, también criticó con dureza a los jueces de su pelea ante el cubano Julio la Cruz asegurando que había hecho más méritos para ganar.
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