Iniciamos un año nuevo, 2023, dejamos atrás un año que será recordado por su complejidad, cuando se unieron factores para crear la tormenta perfecta, que resultó en uno de los peores años en rendimientos financieros, donde la teoría de la diversificación no logró los resultados esperados de defensa.
Un nuevo año puede significar un nuevo respiro de esperanza, que nuestra vida será mejor, nos proponemos metas, y deseamos prosperidad y salud para nosotros, nuestros seres queridos y compañeros. Por eso yo hoy les deseo un año 2023 pleno de bienestar financiero.
Bienestar financiero, es un concepto que cada día vemos que se utiliza más y más por los asesores financieros a nivel local y global. Sin embargo, aprovecho en esta ocasión para profundizar en el concepto, ya que el mismo va más allá del patrimonio que poseemos, su tendencia de crecimiento en el mismo, de una libertad prometida, de un hábito de ahorro, de una meta o recetas mágicas para ser un nuevo millonario.
Bienestar financiero es la intersección entre nuestro capital financiero y nuestro capital humano, por ello, lograrlo implica no solo establecer una meta de ahorro, sino es un trabajo integral que se compone de un esfuerzo emocional, cognitivo y patrimonial. Lograr el balance entre “riqueza”, y la salud mental y física, que nos puede llevar por un camino no explorado de vulnerabilidad, trabajar sobre nuestros esquemas mentales arraigados, los cuales pueden ser promotores de crecimiento o estancamiento ante patrones de comportamiento que nos alejan de nuestras metas o prioridades.
Al trabajar desde el bienestar financiero debemos dejar atrás el enfoque de ver el patrimonio como CUÁNTO dinero, cuánto patrimonio, cuánto tenemos en nuestras cuentas de ahorro, inversiones, inmuebles y deudas o CUÁL es el rendimiento que nos ofrecen; ya que esto representa más bien el CÓMO. Por ende, debemos de iniciar por entender nuestros QUÉ y POR QUÉ; y estás preguntas son profundas, están relacionadas a nuestros principios, valores y seres queridos. Nos lleva, a lo que hoy en materia de gestión patrimonial conocemos con una gestión basada en valores.
En este enfoque de bienestar financiero el centro es usted como cliente, como un ser integral donde cualquier plan parte de sus prioridades y valores, sus seres queridos, y por tanto, esa riqueza o dinero será la herramienta para definir cómo lograrlo.
Cuando logramos entender nuestros mensajes alrededor del dinero, nuestras relaciones, nuestros intereses, podemos lograr un mejor planeamiento financiero y así, plenamente buscar de manera constante el bienestar financiero. En este proceso, es muchas veces necesario hacerse acompañar de amigos sinceros que nos aconsejen y guíen, pero también de profesionales como coaches, asesores financieros, psicólogos, mentores, entrenadores que nos apoyen en el camino de exploración interna y trabajo consciente con nosotros mismos.