Managua. La movilización en las calles para presionar la salida del poder del presidente Daniel Ortega va a continuar, pese a la aparente calma que vive Nicaragua, afirmó el dirigente estudiantil Lesther Alemán.
Según el estudiante de comunicación de 20 años, Ortega no tiene más alternativa que aceptar el adelanto de las elecciones, como lo piden sus adversarios, “porque si no, sería ingobernable”.
La represión a las protestas antigubernamentales ha dejado 317 muertos, cientos de heridos, desaparecidos y detenidos, mientras miles huyen del país por la represión contra los promotores de las protestas y el impacto de la crisis sobre la economía.
“La resistencia en la calle va a continuar, no porque yo venga y lo convoque. Es porque la gente tiene ese sentimiento de continuar en las calles”, declaró Alemán a la AFP en una “casa de seguridad” donde vive en la clandestinidad junto a otros estudiantes.
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Su manifestación contrasta con la imagen de normalidad y calma que Ortega ha transmitido en sus últimas manifestaciones públicas, incluidas entrevistas con medios internacionales.
“Hasta hace 15 días el país estaba paralizado, pero se ha venido recuperando”, declaró Ortega en una entrevista con CNN transmitida el 30 de julio. “Hay una tendencia a que el país se estabilice en el campo económico y comercial”, agregó.
Pero Alemán asegura que ese cuadro es irreal.
“El éxodo masivo hacia Costa Rica y Honduras no es normal; el miedo que respira la gente en las calles al ver a los paramilitares no es normal (...) El discurso de Ortega es una mentira”, sostuvo.
Alemán está convencido de que la lucha continuará por tres carriles: la resistencia en las calles de Nicaragua, la presión internacional de organizaciones y países, y el diálogo gobierno-oposición “para alcanzar una salida pacífica”.
El diálogo del gobierno de Ortega con la Alianza Civil por la Democracia y la Justicia, de la sociedad civil, catapultó a Lesther Alemán como una de las figuras más reconocidas de las protestas iniciadas el 18 de abril para exigir la salida de Ortega del poder.
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En el primer día del diálogo, el 16 de mayo, Alemán tomó la palabra y, dirigiéndose directamente a Ortega, le exigió frenar la represión de los estudiantes y le advirtió que “esta es una mesa para negociar su salida”.
“Ortega perdió las calles, perdió la legitimidad, perdió la gobernabilidad que pintaba hacia afuera, perdió el respaldo internacional y perdió las bases de su partido. Perdió a Nicaragua”, aseguró Alemán.
A juicio del líder estudiantil, la salida de Ortega es la única solución para la crisis que vive Nicaragua. El primer acuerdo del diálogo entre el gobierno y la oposición debe ser el adelanto de las elecciones de 2021 a 2019 para asegurar su salida anticipada.
“Debe renunciar porque la crisis en Nicaragua es por la presencia de Ortega; los crímenes de lesa humanidad son por Ortega en el poder; la crisis económica es por la presencia de Ortega en el poder”, sostuvo sobre el presidente que gobierna en forma continua desde 2007.
Ortega ha rechazado esa posibilidad.
Antes del 18 de abril, Lesther Alemán era un estudiante más en Nicaragua que soñaba terminar sus estudios, trabajar en un diario nacional, y quizás algún día ser productor de alguna cadena noticiosa internacional.
Magro, espigado, con grandes lentes de marco de pasta (tiene miopía), Alemán habla con una imponente voz grave que refuerza la convicción de sus ideas.
El cuarto y último hijo de Lésther Alemán y Lesbia Alfaro reconoce que el clima de protestas masivas contra el gobierno de Ortega ha mermado, pero está seguro de que va a volver.
“Esto es una sismología social: se pueden replegar las fuerzas, tal vez no se vean marchas en una semana. Necesitas eso porque el ser humano se cansa, pero retoma fuerzas para seguir”, explica.
Está convencido de que la movilización tiene que seguir hasta alcanzar el sueño de ver cambios en el país, donde los adversarios de Ortega acusan al presidente de instaurar una dictadura corrupta de la mano de su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo.
“Nosotros el 18 de abril dejamos sueños, anhelos y metas a un lado (...) Pero cuando sucede esta insurrección pacífica de jóvenes, dijimos que hay un solo sueño que vamos a luchar por conseguir, que es ver a Nicaragua libre”, sostuvo.
“Ortega va a salir como la peor cosa de este país. Creo que será recordado por la mucha sangre que derramó, por lo injusto que fue, por lo dictatorial y porque centralizó todo a favor de él. Así será recordado”, vaticinó Alemán.