
Hace unos días, a una compañera del equipo le “tacharon” el carro y le robaron la computadora. Aparte de la perdida material, no pasó nada.
Nuestra compañera está bien y lo único que perdimos fue el equipo. Cambiamos claves, por seguridad, e inmediatamente ella pudo acceder con normalidad a sus archivos y continuar con las labores desde otro dispositivo.
Trabajamos todo en la nube. No tenemos ni un solo documento en una carpeta local. Tampoco usamos un sistema contable o administrativo que esté instado en nuestra computadora. No tenemos un solo servidor en la oficina. ¿Cómo?
Antes, lo beneficios:
1Movilidad. Tengo acceso a toda la información de mi negocio desde cualquier lugar del mundo, cualquier tipo de dispositivo, en cualquier momento.
2 Seguridad. Nuestra información está en servidores con altos parámetros de seguridad, la información crítica inclusive la tenemos en servidores con redundancia así nos aseguramos de que nunca estemos “caídos”.
3 Costo. No tenemos servidores físicos ni alto costo en infraestructura ni mantenimiento. Pagamos únicamente por el espacio de almacenamiento que ocupamos y si necesitamos más, estamos a un clic de distancia.
Claro, contamos con la asesoría de PV Cloud, nos ayudan a que esto de la nube sea un proceso bastante “natural”.
Mis tres aplicaciones favoritas en la nube hacen que sea más fácil gestionar mi negocio: Google Apps, Vtiger CRM y el sistema de contabilidad.
Con Google Apps tengo no solo el correo, si no todos los documentos míos y del resto del equipo.
El CRM me permite tener todas la bases de datos en un solo lugar. La información es del negocio, no del vendedor y eso es clave.
Para muchos todavía suena aterrador todo esto de “la nube”, es un salto necesario para mejorar procesos y tener empresas más eficientes.