¿Tiene una idea de negocio? ¿Le gustaría desarrollarla y recibir asesoría para generar una empresa sólida? En el país existen diversas incubadoras y aceleradoras que le brindan apoyo a los emprendedores, como el caso de UNA-Incuba.
Este centro de apoyo pertenece a la Universidad Nacional y tiene cinco años de existencia.
Maritza Vargas, coordinadora de UNA-Incuba, dijo que quienes participan en esta incubadora reciben acompañamiento personalizado y capacitación para el desarrollo o perfeccionamiento de su modelo de negocio.
Eso incluye desarrollar la propuesta de valor, definir bien el segmento de clientes, los canales, entre otros puntos. En la incubadora se otorga asesoría en temáticas de finanzas, mercadeo, contabilidad, comunicación, entre otras áreas.
¿Cómo se ingresa?
Para integrarse a UNA-Incuba, el emprendedor debe llevar un curso de emprendimiento, que está abierto a los estudiantes de la institución y a todo público.
A esto se le conoce como la etapa de preincubación (del Programa UNA-Emprendedores), que va desde el desarrollo de la idea a la generación de un primer modelo de negocio.
Después, un jurado elige a 15 emprendedores, luego de llevarse a cabo una feria en la que se dan a conocer 50 proyectos preseleccionados.
En algunos casos, si el proyecto ya cuenta con un modelo de negocio más desarrollado, se puede aceptar sin necesidad de pasar por la fase de preincubación.
La coordinadora contó que de esos 15 proyectos, usualmente algunos deciden abandonar el proceso en la fase inicial (alrededor de 5) y, de los 10 restantes, alcanzan el éxito 6.
Empresas creadas
Las iniciativas que ha acogido la incubadora a lo largo de su existencia son proyectos intensivos en conocimiento (biotecnología y química), tradicionales (agroindustria o de alimentos) y sociales.
Algunas empresas que salieron de la incubadora son:
Balanced Energy: Su propósito es construir una planta que transforme aquellos plásticos que se desechan en un combustible llamado “polydiésel”. Según el sitio web de la empresa, dicho combustible es similar al diésel y ya se ha probado en vehículos.
Reuti-Piña: La empresa utiliza los residuos que se originan del cultivo de piña para extraer una enzima (llamada bromelina), que sirve de insumo para diferentes industrias (la farmacéutica y alimenticia, por ejemplo).
Pet in Love: Elaboración de ropa para mascotas (como perros y gatos) a partir de telas usadas y que emplea a mujeres jefas de hogar.
Nueva Oportunidad: Brinda apoyo a los privados de libertad para que desarrollen un emprendimiento.
Limpieza del agua contaminada
Un proyecto que ingresará el próximo año a la incubadora y que pasó por el proceso de preincubación es Winser-Clear Water Solutions.
Está formado por Leonardo Vargas y Andrés Salas, dos químicos industriales, quienes desarrollaron un producto para darle tratamiento al agua y así eliminar la presencia de metales o sustancias tóxicas como el arsénico.
Consiste en un bioadsorbente magnético (que es como un polvo), el cual está hecho de quitosano, un desecho de la industria camaronera, que permite limpiar el agua.
Además, el bioadsorbente contiene partículas de hierro, que poseen capacidades magnéticas que permiten recuperarlo una vez utilizado.
Winser se encuentra en la fase de prototipo (realizando pruebas) y dentro de sus potenciales clientes se hallan instituciones como el Instituto de Acueductos y Alcantarillados y las Asociaciones Administradoras de Acueductos y Alcantarillados (Asadas).