Un proyecto en crecimiento tendrá sin duda más colaboradores con quienes compartir labores y planes. Con un grupo por dirigir, muchas necesidades por atender, proyectos, y llamadas muchas veces se deja de lado la mejor manera de estimular las habilidades e inteligencias de los empleados.
En el libro "Lo que los mejores estudiantes universitarios hacen" (What the Best College Students Do), su autor Ken Bain dirigió un estudio que descubrió que las personas más creativas y exitosas tienen la creencia de que la inteligencia es expandible.
Si usted se cuestiona si ¿funciona recordarles a los empleados qué tan inteligentes son?, el profesor de de maestría y de desarrollo gerencial en las áreas de liderazgo, planeamiento estratégico y cambio organizacional del INCAE, Germán Retana, nos responde que hay formas de elevar la autoestima que pueden contribuir, ésta es una.
"Sin embargo, su efecto depende de que este discurso realmente sea la medicina que el equipo necesita; de lo contrario el mismo provocará efectos poco favorables", agrega el experto. Pero la posibilidad de mejorar está latente siempre en un grupo de trabajo. Retana nos menciona cuatro ideas que podrán ser de gran utilidad:
1. Toda persona en toda organización puede mejorar su desempeño. En ocasiones depende de mejorar aptitudes y en otras de cambiar actitudes, cada caso es diferente. "Si la actitud existe pero la capacidad no, entonces habrá que recurrir al 'coaching', a la capacitación y/o a la asesoría individualizada, medios para elevar calidad de desempeño. Pero si lo que hace falta es la actitud, primero se deben conocer las razones de fondo que frenan a las personas de dar lo mejor de sí mismo y luego habrá que trabajar para quitar del camino esas barreras". dijo Retana.
2. Despertar el sentido de pertenencia es esencial. Los miembros de una familia desean lo mejor para sus miembros y se las ingenian para apoyarse y para elevar el bienestar por medio de nuevas ideas. "Cuando las personas sienten las organizaciones como propias, como su hogar y cuando sus ilusiones están alineadas con las de la empresa, se desata en forma natural el deseo de cambiar para mejorar. Así, las ideas surgen y son puestas sobre la mesa. No debemos quedarnos en los síntomas sino en las razones de la eventual falta de creatividad, innovación y apertura al cambio". explica el profesor.
En un buen ambiente laboral, la transformación es asunto común, las personas están anuentes a intentar hacer las cosas en mejor manera. Los líderes de equipos que se ocupan del clima laboral tienen más posibilidades de encontrar soluciones internas a los problemas y una persistente proactividad para aprovechar nuevas oportunidades de crecimiento.
3. Propicie que salgan de la zona de confort. Los líderes de las organizaciones tienen la tarea de "retar" a sus miembros a ir por más. "El reto motiva a las personas; lo que queda por definir es la magnitud de ese reto pues si no es alcanzable la desmotivación crecerá ante la percepción de que simplemente la meta no es realista por la ausencia de recursos, tiempo y procesos", comenta Retana.
Los desafíos deben ser percibidos con un espíritu de superación y no de castigo por los resultados anteriores. Además, será esencial que los líderes acompañen al equipo en el esfuerzo para alcanzar las nuevas metas.
4. Facilite tiempo para que investiguen y desarrollen ideas. La posibilidad de que tengan más tiempo para investigar y desarrollari deas es una práctica común en empresas visionarias. Incluso hay políticas que premian las nuevas ideas. Se pueden hacer concursos sobre reducción de costos y sobre proyectos innovadores que agreguen valor al cliente interno y externo. "Cuando estas iniciativas se hacen en equipo, se contribuye además a mejorar el clima laboral, la cohesión y el sentido de pertenencia, factores que ayudan a fortalecer el sentido de pertenencia y el desempeño", afirma Retana.