¿Quiere un negocio más fuerte, con mayores probabilidades de atraer aliados y generar ventas e ingresos?
Para que su emprendimiento alcance un mayor potencial es necesario asesorarse en ámbitos que quizás no tengan relación directa con el giro de la empresa, pero que son relevantes e inevitables de abordar, como el legal, administrativo y financiero.
Un negocio formalizado
Una empresa que opera legalmente no solo le ahorrará dolores de cabeza, sino que le dará mayor confianza a otras empresas para realizar negocios con usted.
Para ello, es importante orientarse con un notario para ver qué tipo de sociedad le conviene más constituir y, una vez que lo haya definido, proceder con su inscripción en el Registro de Personas Jurídicas del Registro Nacional.
Por otro lado, toda empresa que esté operando debe cumplir con obligaciones tributarias. El primer paso es inscribirse como contribuyente en la Dirección General de Tributación del Ministerio de Hacienda.
Otra obligación legal que no puede obviar es inscribirse como patrono ante la Caja Costarricense del Seguro Social y consignar a todos sus trabajadores, así como contar con la respectiva póliza de riesgo de trabajo.
A nivel municipal también se deben cumplir con requisitos para operar, como la obtención de la patente, entre otros deberes.
De acuerdo con las abogadas Melania Dittel y Carolina Flores, del Bufete Arias & Muñoz, una empresa que cuenta con todos sus registros y permisos en orden tiene una mayor posibilidad de alcanzar socios y alianzas, ya que sus riesgos legales son casi nulos.
Según ellas, esa formalización hace que sus aliados se puedan concentrar en el desarrollo de temas de mercado y comerciales y no en solucionar conflictos legales que pudieron haberse prevenido de haberse mantenido un registro formalizado.
Una empresa legalizada tiene un acceso más sencillo a créditos, lo que le brinda más oportunidad de crecer y a participar en licitaciones, ya sean públicas o privadas, sin que haya riesgo de perder puntos por no cumplir los requerimientos que se solicitan.
Propiedad intelectual
Un campo que también es importante proteger está relacionado con los activos intangibles, que son las creaciones intelectuales de las empresas.
Por ello, se aconseja a las empresas identificarlos bien.
"Las marcas, patentes, derechos de autor y los secretos comerciales son herramientas valiosas para agregar valor a su empresa y para diferenciar sus servicios de los de su competencia. Y esto es no solo aplicable a una empresa tecnológica o de investigación científica, sino a cualquier rubro", mencionó Monserrat Guitart, líder del área de Propiedad Intelectual de Arias & Muñoz.
De acuerdo con la experta, una estrategia errada de propiedad intelectual puede llevar a la pérdida de esos activos y afectar negativamente una estrategia de comercialización por medio de franquicias e incluso ser el freno para que inversionistas decidan finalmente aportar a la empresa o decidir adquirirla.
El campo administrativo
Toda empresa debe contar con una estrategia empresarial en la que se estipulen objetivos y metas, en la que se identifiquen sus principales procesos y la forma de cómo mejorarlos, así como determinar la administración del capital humano y la estrategia comercial, dijo Julieth Calvo, gerenta de Pymes de Costa Rica.
A su vez, se aconseja evaluar las capacidades internas del negocio, la cartera de clientes, la posibilidad de crecimiento, la calidad del producto o servicio y estudiar a los competidores.
También se debe medir constantemente si los objetivos establecidos se están cumpliendo.
Networking
Una práctica que le ayudará a establecer contactos para eventualmente concretar negocios es asistir a eventos de networking, donde podrá relacionarse con otros empresarios y hacer alianzas.
Expertos en esta área como Florencio Marchelli, fundador de Networking Days America, señalan que algunas reglas de oro del networking son ser espontáneo, empático, sincero mientras se sostiene una conversación con otro emprendedor.
Hay que entender que el networking no es vender en la primera cita, sino generar lazos de confianza con potenciales aliados.
Cuide sus finanzas
Diego Benítez, director de la empresa Empodérate, formuló que las pymes y startups desde su inicio deben tener claro sus flujos de ingresos y de costos y definir sus expectativas de rentabilidad y tiempos de recuperación.
Además, al momento de constituir la empresa se deben tomar tres decisiones financieras relevantes.
La primera está relacionada con qué tipo de proyectos estarán dispuestos a invertir y la rentabilidad mínima esperada.
La segunda radica en establecer si utilizarán algún tipo de financiamiento, para cuáles procesos específicos y bajo qué condiciones.
La tercera tiene que ver con cómo se repartirán las ganancias.
Las empresas deben cuidarse de tener costos fijos altos, así como de realizar compras excesivas que no tengan relación directa con su giro productivo.
Además, una regla básica –pero muchas veces ignorada– es hacer una separación de las finanzas personales de las finanzas de la pyme, pues este es uno de los aspectos que más afectan el desarrollo de las empresas.