Milka elabora 128.000 toneladas de chocolate al año, es decir unas tres millones de tabletas al día, en una fábrica ubicada en Lörrach, Baden-Württenberg, Alemania.
Esas cifras la convierten en la planta más grande del mundo de la marca, y en la que un alajuelense desempeña el puesto de gerente de Calidad.
José Rojas es un microbiólogo que luego de seis años y medio de trabajar en la planta de Belén, en Costa Rica, pasó a formar parte del equipo de calidad de Alemania, Austria y Suiza.
El microbiólogo destacó que las dimensiones de la planta hace que sea un gran reto de aprendizaje y que, además, le permite destacar en gran manera dentro de la firma.
“Somos benchmark y líderes en sistemas integrados, por lo que siempre hay nuevos proyectos o metas que alcanzar. Además, liderar un equipo de trabajo alemán y trabajar en un ambiente multicultiral también ha sido una gran experiencia; todos los días aprendemos de nuestras diferencias”, agregó.