Ya es oficial. La planta local de manufactura y prueba de la empresa estadounidense de tecnología Intel cerrará definitivamente a finales de este 2014 y dejará a 1.500 personas sin empleos.
Así lo confirmó la corporación en un comunicado de prensa emitido esta mañana. En él, se indica que disminuirá sus operaciones de Ensamble y Prueba en Costa Rica, durante los próximos seis meses y cerrará la planta antes del final del 2014.
"Esta fue una decisión difícil. La Corporación ha tenido una estrecha relación con la comunidad y con el Gobierno. Intel buscó múltiples opciones, tanto internas como externas. Al final, ninguna de estas opciones se consideró como alternativa viable a la luz de las necesidades de largo plazo", se lee en el comunicado.
La información también fue compartida en una reunión con sus empleados sostenida hoy en horas de la mañana.
Este lunes 7 de abril en la noche, la presidenta Laura Chinchilla se reunió con Mike Forrest, gerente de la planta en el país, y con el CEO de la corporación, Brian Krzanich, para conversar sobre la decisión de la corporación de cerrar su operación de manufactura de ensamble y prueba de procesadores para PC y servidores en el país.
El plan de la corporación sería trasladar su producción costarricense a Asia.
"Durante el año pasado la compañía ha sido clara en que está dando los pasos necesarios para mejorar la eficiencia y eficacia de sus operaciones globales. En este sentido, se ha decidido consolidar las operaciones de Ensamble y Prueba. Después de un extenso análisis, la compañía ha concluido que la mejor solución de largo plazo para maximizar la eficiencia y la efectividad operacional a nivel mundial es cerrar sus operaciones de Ensamblaje y Prueba en Costa Rica", se agrega en el comunicado.
En su edición de este sábado 5 de abril, La Nación informó que un grupo de fuentes relacionadas con el sector revelaron que Intel continuará la operación de los departamentos de Ingeniería y Diseño , para los cuales contratará 200 nuevas plazas especializadas en esos campos. El área de servicios globales se mantendrá intacto.
La empresa tecnológica habría fundamentado su decisión en la necesidad de una mejora en la competitividad y no en factores internos del país.
Es el cierre de un ciclo que se inició en 1997, cuando Intel abrió sus puertas en el país para ensamblar procesadores para computadoras de escritorio, en aquel momento elPentium II .
La reestructuración dejará en suelo nacional los otros dos focos de negocio, el Centro Global de Servicios y el Centro de Ingeniería. Asimismo, la decisión implicará el despido del 55% de su personal (1.500 personas). Se quedarán 1.200 personas y se contratarán 200.
Un estudio presentado por Intel en el 2012 determinó que la producción de la compañía representó más del 6% del Producto Interno Bruto (PIB) real del país. Además, entre 1997 y 2011, la inversión de la firma significó entre el 3% y 6% de la Inversión Extranjera Directa (IED).
Solo el año pasado, la compañía exportó más de $2.000 millones (su promedio anual de los últimos años) y desde su instalación local se convirtió en el principal exportador del país (es el responsable del 20% de las ventas al exterior), de acuerdo con datos de la Promotora de Comercio Exterior.
Cierre estaba en el agenda
La decisión de Intel de cerrar su operación ensamble y prueba de procesadores para servidores y PC en Costa Rica fue parte de proceso de proceso de análisis.
“En el 2010, yo había escuchado, en una reunión en México, a un alto funcionario de Intel de ese país hablar que los modelos de planeamiento de la corporación tienen un tiempo y que Costa Rica (la operación de manufactura) se revisaría en el año 2014. No me toma por sorpresa”, dijo Alexander Mora, presidente de la Cámara de Tecnologías de la Información y Comunicación (Camtic).
Un año después, la presidenta Laura Chinchilla se reunió con el entonces CEO de Intel, Paul Otellini, en la primera reunión de la gira de negocios que realizaba por San Francisco, Estados Unidos.
La comitiva costarricense, integrada también por el ministro de Ciencia y Tecnología, Alejandro Cruz, y su homóloga de Comercio Exterior, Anabel González, según reportó el diario La Nación.
En ese momento, el Gobierno dijo que el objetivo de la reunión era lograr que Intel tomara decisiones prontas, sea la de ampliar la inversión en investigación ya establecida en la planta en Belén o convertir a Costa Rica en su punta de lanza para las operaciones dedicadas a América Latina.