Las prioridades de la generación millennial –jóvenes de entre 20 y 35 años que se hicieron adultos con el cambio de siglo– están transformando radicalmente la forma como ven el mundo laboral. Si hace dos décadas el factor económico era sumamente importante para aquellas personas que soñaban con trabajar en multinacionales, la tendencia actual es que los jóvenes se vinculen a aquellas empresas que permitan una mayor flexibilidad y libertad laboral.
"Estos jóvenes piensan que conseguirán vender sus conocimientos a cualquier empresa, sea grande o pequeña", dijo Joao Lins, socio de PwC Brasil que participó en la edición 13 del Congreso Peruano de Gestión de Personas organizado por Seminarium y El Comercio. Además, los millennials dan importancia a los valores y creencias de la organización en la que trabajan.
Según el estudio Future of Work, de PwC, la responsabilidad social corporativa es un factor decisivo para que estos jóvenes decidan dónde quieren trabajar.
"Las empresas que no tengan en cuenta estos elementos van a tener dificultades en atraer talento en el futuro", apuntó Lins.
El rol de los recursos humanos
En la próxima década la gestión de personas tendrá que dejar de enfocarse únicamente en la productividad de los empleados, la gestión de costos y el desempeño de los negocios, para poner énfasis en indicadores de desempeño que analicen los perfiles profesionales que agregan más o menos valor a la empresa.
La misión de los recursos humanos pasará también por actuar en la construcción de la cultura de la organización y su relación con la comunidad. "Van a tener que dedicarse menos a cuestiones de control y gestión de la fuerza de trabajo para trabajar en la articulación y el compromiso de la organización con sus empleados y el mundo".