Con un pequeño préstamo, Frank DeLuca fundó en 1965 un local de venta de sandwiches en EE. UU. Casi 50 años después, aquel local se multiplicó a 42.500 restaurantes en 100 países y convirtió a Subway en la más grande cadena de comida rápida del mundo.
En Uruguay, la multinacional tiene 12 locales y busca seguir creciendo gracias a su red de franquicias. Con esa estrategia, proyecta llegar a unos 20 restaurantes para fin de 2015.
En Costa Rica, por ejemplo, la cadena estimaba en julio cerrar el año con 63 locales, siendo también la cadena de cómida rápida con más establecimientos.
En este esquema, los franquiciados son un aliado importante para la expansión de la cadena. Por ello, a nivel local, la empresa organiza seminarios en lo que va del año ya realizó dos para informar a los interesados sobre cómo funciona el negocio y sobre la marcha de la empresa en el mercado local.
Pero ¿quiénes emprenden en este sistema? ¿Qué buscan?
"Las características básicas de quienes buscan franquicias son casi todas las mismas: negocios con menor riesgo que el habitual, que no tengan que pensar o desarrollar cosas y ser parte de una red", resumió Álvaro Banchero, manager de Subway para Sudamérica (con excepción de Brasil y Venezuela).
El perfil es amplio, no hay límite de edad, preferencia de género, o una exigencia de experiencia previa en el rubro gastronómico; el único requisito es la dedicación.
"Subway no es una inversión, es un trabajo", remarcó Banchero, al señalar que formar parte de la red implica involucrarse en el negocio. Luego viene el desembolso.
La inversión para montar un local va desde $50.000 a $90.000, aunque Subway aporta $25.000 como parte del acuerdo entre el franquiciado y la casa matriz en EE.UU.
La cadena también aporta capacitación:la Universidad de Subway brinda 18 cursos online a los emprendedores.
Otro aspecto clave del negocio es la elección del local, sujeta a la aprobación de Subway. Aquí la cuestión del espacio es menos problemática que el reto de encontrar una zona transitada o comercialmente atractiva.
"Tenemos una gran ventaja, entramos donde nadie entra. Nuestros locales tienen entre 40 y 120 metros cuadrados", resaltó el ejecutivo.
Servicio al cliente
La expansión de las franquicias de Subway en Uruguay ha ido de la mano del aumento de la clientela. Este año, los restaurantes reciben una media de 1.700 comensales por semana, 200 más que en 2013. Actualmente, unas 20.000 personas por semana comen en Subway.
Según Banchero, que supervisa 500 locales en la región, los consumidores se comportan igual en el mundo al elegir sus sabores preferidos.
"Lo que más se vende es el core menu", señaló.
Cada país tiene ingredientes locales como parte de su cultura alimenticia, empero el porcentaje de clientes que los pide en su orden es bajo.
En general, los clientes de los restaurantes de comida rápida muestran las mismas expectativas respecto a lo que esperan de estos establecimientos, como "la certeza de lo que van a comer, de lo que van a pagar, un buen servicio, locales limpios y accesibles, y valor", enumeró Banchero.
Un valor más importante aún es la seguridad en la comida. Por eso se realizan capacitaciones a los franquiciados, y se efectúan un par de inspecciones al mes a los locales para velar por el cumplimiento de los estándares de calidad.
Los restaurantes Subway ofrecen una variedad de "mejor para usted" elementos de menú, con el fin de mejorar el contenido nutricional de los alimentos servidos.
Banchero auguró que el sector del quick service restaurant seguirá creciendo en el mundo.
Subway prevé contar con 60.000 locales para 2020.