Cuando las empresas formulan los planes de negocios y sus estrategias, el componente de capital humano usualmente no juega el rol preponderante que le corresponde.
Sin embargo, son los gerentes de recursos humanos (GRH) los que pueden facilitar a los departamentos de compras, manufactura, mercadeo, ventas y finanzas, implementar sus estrategias con éxito, mediante la atracción, retención, desarrollo y desempeño del talento que requieren para lograrlo.
Alinear la gestión del talento con las estrategias del negocio se convierte en un imperativo para lograr los resultados esperados.
Incorporando a la GRH en la mesa de planeamiento, permitirá prever qué tipo de competencias se requerirán, cómo se obtendrán y desarrollarán para lograr las estrategias del negocio. Además, esta gerencia es la llamada a liderar la necesidad del cambio; podrá mapear los cambios organizacionales requeridos y entrenar a los líderes para aprovechar las oportunidades que estos cambios puedan generar.
Cuando la GRH expande su rol tradicional puede, sin lugar a dudas, tener un impacto significativo en la creación de valor. Para alinear adecuadamente la gestión del capital humano con la estrategia del negocio, se necesita primeramente estar organizado, de manera que pueda jugar el papel que le corresponde en el planeamiento estratégico de la empresa.
Es la gestión de recursos humanos la que puede impulsar las otras áreas de la organización y por ello necesita asegurarse de que el capital humano esté efectivamente alineado con la estrategia escogida por la organización.
Para capitalizar, las empresas necesitan adoptar esta perspectiva de la gestión de recursos humanos.
La GRH debe poder articular los beneficios estratégicos que provee mediante la medición de su impacto y ser reconocido como un generador de valor. Específicamente, necesita medir el liderazgo, la cultura, las competencias, el aprendizaje y el alineamiento organizacional para establecer el marco de referencia de los impulsores de la estrategia.