Estados Unidos tomará el relevo en el imperio del petróleo

Las reglas en el imperio del oro negro están por variar. Estados Unidos está acelerando su producción de petróleo y la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) espera que para el 2015 reemplace a Arabia Saudita como el mayor productor del mundo.

El cambio podría restarle incertidumbre a una de las cotizaciones de materias primas con mayor peso en los mercados financieros internacionales.

Una importante cantidad de los grandes productores actuales de petróleo está ubicados en regiones marcadas por la inestabilidad política, o padecen turbulencias internas que inyectan volatilidad al precio internacional.

Esto se refleja en constantes oscilaciones, tanto del WTI (precio de referencia para Estados Unidos) como el Brent (precio de referencia para el mercado europeo).

Las inestabilidades políticas de Oriente Medio no son las únicas responsables de los vaivenes en el precio del barril de crudo.

“Los precios fundamentales del petróleo se ven afectados por otras cosas que no son las que siempre se han sabido, huracanes, guerras, crecimiento económico. Por ejemplo, se sabe que el 40% del precio del petróleo se define en el mercado de valores, este es un fundamento reciente para el precio del petróleo”, comentó Norman García, analista financiero del Grupo Acobo.

¿Nuevas reglas?

Las repercusiones de las escaladas en el precio del barril de petróleo llegan de manera directa al bolsillo de los consumidores cuando cargan sus tanque de gasolina y genera un efecto dominó con los demás precios de bienes y servicios.

Estados Unidos, durante el 2013, ha sido el principal proveedor de combustibles para Costa Rica. Un 87% de los combustibles importados por Recope han provenido de ese país.

Recope espera que el precio promedio del barril de crudo WTI ronde los $98,94 durante el 2014; y $106,23 por barril de petróleo Brent.

“El resurgimiento de Estados Unidos como primer productor de hidrocarburos abre oportunidades para que el petróleo deje de ser un commodity volátil en lo político, social y económico, pero no se puede asegurar que esto vaya a suceder”, opinó Eric Solano, director de Comercio Internacional de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).

Líder en potencia

No obstante, el cambio en el mapa de producción petrolera mundial se gesta lejos de corrillos de mercados de materias primas.

La producción de Estados Unidos crecerá a 11,6 millones de barriles al día para 2020, desde los 9,2 millones de barriles diarios en 2012.

Mientras tanto, la producción de crudo de Arabia Saudita caerá de 11,7 millones de barriles diarios a 10,6 millones; y de 10,4 millones a 10,7 millones de barriles en Rusia, según las proyecciones de la IEA.

La diferencia se gesta por el uso de nuevas tecnologías para explotar las concentraciones de esquistos bituminosos en Dakota del Norte y Texas (EE. UU).

Estos esquistos son rocas sedimentarias arcillosas que contienen petróleo. Este tipo de formación son denominados yacimientos no convencionales, y han comenzado a explotarse con la aplicación de nuevas tecnologías.

Esta nueva tecnología es la fracturación hidraúlica o fracking . Consiste en perforar hasta las concentraciones de esquisto, y posteriormente se inyecta algún material (generalmente agua, arena y químicos) para ampliar las fracturas existentes en las rocas de manera que se facilite la salida del hidrocarburo contenido en su interior.

“El mérito del fracking es que cantidades muy grandes de petróleo y gas natural que en el pasado no eran atractivos comercialmente, han podido ser recuperados por este método, y se ha generado una verdadera revolución energética, que se ve reflejada positivamente en la economía mundial”, comentó Mihaela Dobrinescu, ingeniera y geofísica de Recope.

Una revolución que podría traer estabilidad al precio del crudo y al bolsillo de los consumidores.