El Banco Mundial (BM) recortó sus perspectivas de crecimiento para América Latina este año del 3,5% al 3,3%, en una nueva versión de sus previsiones económicas mundiales.
El informe "Perspectivas económicas mundiales - junio 2013" señala que el crecimiento en América Latina y el Caribe se fortalecerá en forma marginal a 3,3% en 2013, a partir de 3,0% en 2012. Una disminución de los precios de los productos básicos y una deprimida actividad mundial se señalan como los principales factores que influirán en el crecimiento.
En su conjunto, el Producto Interior Bruto (PIB) mundial debería crecer en torno a un 2,2% este año, por debajo de la expansión registrada en 2012 (+2,3%) y menor a las previsiones publicadas en enero por el organismo (+2,4%).
Los países en vías de desarrollo, en particular el grupo denominado Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) serán los que se encargarán de guiar la economía mundial.
"Argentina y Brasil se recuperarán tras la desaceleración experimentada en 2012, pero al otro extremo del espectro de previsiones se sitúa Venezuela, donde "la reversión de políticas altamente expansionistas provocará una fuerte desaceleración en el crecimiento del PIB, a 1,4% en 2013", cita el informe.
La entidad señala que las mejoras en términos comerciales apoyarán el crecimiento en América Central, mientras que en el Caribe, se verá retrasado por las limitaciones financieras y los necesarios ajustes fiscales.
Por su parte, la zona euro sigue ofreciendo signos de inestabilidad que afectan al mundo entero, pero en líneas generales "los riesgos de las economías avanzadas se han relajado y el crecimiento sigue afirmándose", según los expertos del Banco .
Asia oriental y el Pacífico crecerá un 7,3% este año, Europa y Asia central un 2,8%, Oriente Medio y Norte de África un 2,5%, Asia meridional un 5,2% y África subsahariana un 4,9%.
"Aunque hay señales de esperanza en el sector financiero, la ralentización de la economía real está resultando inusualmente larga", declaró Kaushik Basu, vicepresidente y primer economista del Banco Mundial , citado en el comunicado.
"Esto se ve reflejado en la tasa de desempleo obstinadamente alta en las naciones industrializadas y en la actual alza en la zona del euro, y en el lento crecimiento de las economías emergentes", añadió.