En su campaña para ser rector de la Universidad de Costa Rica (UCR), Henning Jensen prometió un centro de estudios más inclusivo.
En octubre empezó un plan piloto llamado “+ Equidad”, cuyo contenido consta en un documento que no se le ha dado completo a EF, pese a reiteradas solicitudes de tal información, de evidente interés público.
Lo poco que se sabe de ese plan es que pretende fortalecer el razonamiento cuantitativo y las habilidades comunicativas de estudiantes de décimo año del colegio, para mejorar su rendimiento en el proceso de admisión.
El 21 de octubre, EF retó el plan piloto del rector.
El 75% de los aspirantes de colegios públicos para ser admitidos en la UCR no llega ni a la etapa de concurso de carrera. El 33% no pasa el examen de admisión. Ese porcentaje se reduce a 10% en el caso de colegios privados. ¿Dos meses de cursos en décimo año, como propone su plan “+ Equidad” realmente son el mejor aporte que puede dar la UCR para ser más inclusiva?
Seguramente no, seguramente podemos hacer mucho más, pero al plantear la pregunta de esa manera se establece un vínculo de responsabilidad.
¿La UCR no tiene responsabilidad en ese tema?
La UCR no es la responsable de todo eso.
¿No tiene la UCR una responsabilidad de terminar con esa brecha?
Tiene parte de la responsabilidad, pero la responsable de la inequidad social es de la sociedad costarricense.
¿Y, en esa situación, es eso lo mejor que puede hacer la UCR?
Bajo su visión del mundo, la UCR debe contribuir a que se logren las transformaciones que la sociedad requiere.
Por más que esos cursos ayudaran de algo, crece la demanda por cupos en la UCR, pero los campos nuevos crecieron apenas un 3% entre el 2006 y el 2011. Eso hace que las probabilidades de ingreso de todo bajen con el tiempo y que el efecto de este programa de equidad sea dudoso.
Todo el sistema universitario tiene que aumentar su capacidad de cobertura.
¿Se planea también esto en el programa?
Tenemos que hacerlo.
¿Tiene una estimación de cuánto es lo que planean incrementar los cupos?
Nos hemos comprometido a un incremento en un 20% en la matrícula, pero el plazo no está aún definido. Lo que pasa es que, se lo digo con transparencia, hemos avanzado lentamente en esos propósitos.
El plan no toca el tema de la existencia de personas altamente disciplinadas, con muchas habilidades no cognitivas, que, en el contexto de su colegio son del 5% con mejores notas, pero su rendimiento en el examen de admisión los saca del sistema. La ecuación actual de admisión no es sensible a eso, solamente se consideran las notas del colegio y la nota en el examen de admisión ¿Cómo pretenden traer más equidad a la UCR si la ecuación para admitir personas no es sensible al rendimiento de sus personas en sus contextos?
¿Pero, por qué dice usted que no es sensible?
Porque no existe nada en la ecuación de admisión que permita al sistema entender que, si bien alguien de Limón puede no tener un mejor en rendimiento que una persona de San José, podría ser de la mejores de su zona.
Yo estudié en una escuela pública, en una zona bastante marginada.
La tendencia nos dice que su caso no es lo normal.
Era una escuela unidocente. Eran condiciones precarias, y a pesar de eso he tenido una carrera académicamente exitosa.
¿Y en el fondo qué persigue la Universidad de Costa Rica con el actual examen de admisión?
La UCR persigue detectar a aquellas personas que tienen la capacidad para realizar estudios superiores. Y considera la notas del colegio para aumentar la capacidad predictiva de la prueba.
¿Y por qué no hacer la prueba sensible a quién era usted en el contexto de su colegio?
Sí, nosotros podríamos hacer una estratificación.
¿Como la que hace Chile?
Yo no sé qué hace Chile, y si lo está haciendo, no lo está haciendo muy bien (ríe).
Ellos demuestran que si agrego una variable en el proceso de admisión que indique cómo estoy posicionado en mi colegio, en mi contexto socioeconómico, eso predice muy bien mi rendimiento en la universidad. Aplican un sistema de ranking que considera esta tercera variable. Mi punto es que Chile trata de enfrentar el tema como el que ustedes quieren enfrentar, pero con medidas más agresivas que las que usted propone. Si realmente se quiere promover un cambio en la UCR, ¿por qué no hacen esto?
Porque es un proceso (ríe).
¿Y en qué parte del proceso estamos?
Estamos al principio de un proceso de cambio. Tenemos esta prueba de admisión desde finales de los años cincuenta.
¿Entonces van a cambiar esa prueba de admisión?
No necesariamente vamos a cambiar esa prueba. Podemos hacer ensayos estadísticos que nos permitan estratificar a quienes hacen la prueba.
¿La UCR tiene que cambiar la ecuación que utiliza para admitir y rechazar estudiantes?
Tenemos que someter a análisis esas posibilidades, pero estamos empezando con un primer cambio, que usted lo puede calificar de tímido, y tal vez lo sea, pero esta es una experiencia que va a llevar a otras enseñanzas.
¿Cuánto plazo de testeo habrá que esperar?
Ah no... eso lo tenemos que hacer rápido, porque en nuestra universidad tenemos estadísticas y sabemos el problema.
“No tenemos una actitud ingenua ante el problema. Tenemos que acumular experiencia y ver los resultados de esta primera experiencia”.
Hay mucha presión sobre la Universidad de Costa Rica, el país siente mucha desigualdad en ella. Los datos que aporto nos hablan de 3.174 personas de colegios públicos que están entre el 5% mejor de su generación, y que quedaron fuera de la UCR. Son personas responsables, son buenos estudiantes en sus contextos y sus ingresos hubieran mejorado si vienen a la UCR. ¿Por qué no ser más agresivos al plantear medidas más inclusivas?
La gente quiere ver una universidad más agresiva y es así, la estamos cambiando (ríe).
¿Qué le parece esa política de Chile?
Yo estuve hace un par de semanas en Chile, vi una presentación, y esto es algo que para ellos es una opción en un sistema educativo exageradamente excluyente.
“Ellos están tratando de idear un sistema que actúe ya no tanto contra la desigualdad de los procesos económicos, sino por una exclusión de la población joven de la educación superior”.
¿Me quiere decir que no da para tanto en Costa Rica?
Yo no digo eso. La UNA tiene un sistema estratificado, y para ellos ha sido exitoso. Lo que pasa es que acá partimos de modelos diferentes. El TEC tiene un sistema de cuotas para poblaciones marginadas. Eso no es nuevo en Costa Rica.
Solamente la UCR no afloja.
El único que no afloja parcialmente, porque queremos hacerlo, pero de una manera diferente. Con todo respeto, lo que hace el TEC a nosotros no nos resultó paradigmático o como aquello que nosotros queremos emular, y queremos ir por otro camino: mejorar las habilidades cognitivas de personas en zonas realmente excluidas, en colegios donde nunca en la historia han enviado a alguien a la UCR.
¿Cuánto tiempo se debe esperar para que ver un cambio en el proceso de admisión en la UCR?
Creo que unos dos años. Estos cambios no los puede operar únicamente la administración. Hay normativa de admisión y la normativa es cuestión del Consejo Universitario.
Rector de la UCR
Henning Jensen P. Ocupa el cargo desde el año 2012. Psicólogo clínico.Fue director del Instituto de Investigaciones Piscológicas (85-91) y Decano de la Facultad de Ciencias Sociales (91-99)