El Poder Ejecutivo presentó este viernes a la Asamblea Legislativa el nuevo proyecto de presupuesto nacional para el ejercicio económico del 2018, que plantea un incremento de las erogaciones del Gobierno Central en un 3,2% y que se estima en un total de ¢9,3 billones.
La propuesta –que estará en análisis de la Asamblea Legislativa hasta la última semana de noviembre- incluye un importante crecimiento de un 26% en el pago de intereses, el más alto que puede observarse –al menos– desde el 2010.
El crecimiento al presupuesto nacional es significativamente menor al observado el año pasado. Entre agosto del 2016 y agosto del 2017 el presupuestos autorizados había crecido en un 13%.
Sin embargo, entre el 2015 y el 2016 el Gobierno logró contenerse aún más, pues el aumento registrado fue de un 2%.
Entre las variaciones, una de las más importantes es el pago de intereses, que para el 2018 representarán ¢1,38 billones (casi un 15% del presupuesto nacional). Este salto y peso creciente preocupa a la cartera de Hacienda.
"Los intereses han venido incrementándose producto de la atención al servicio de la deuda. Desde el 2009 venimos teniendo déficits recurrentes. El saldo de la deuda ha venido aumentando y la atención a los intereses está afectando cada vez más. Esta es la partida que más está aumentando en el presupuesto que presentamos: el pago de intereses", dice Marjorie Morera, Directora del Presupuesto Nacional.
En general, el pago del servicio de la deuda pública sigue siendo el rubro más importante del presupuesto nacional. En el 2018 este tipo de gastos representarán casi un tercio del presupuesto (32%), una proporción mucho mayor a la que el Estado gasta en cualquier otro tipo de instituciones, como el Ministerio de Educación Pública.
Remuneraciones aumentan en un 7%
Mientras tanto, las erogaciones en remuneraciones (que incluyen salarios, contribuciones a la seguridad social, entre otras) se estimarán para el 2018 en 2,6 billones de colones, un 7% más que en el año pasado.
Para Morera, el Ejecutivo realizó los mayores esfuerzos para contener el crecimiento de ese rubro al mínimo.
“Todo lo que son remuneraciones en todas las instituciones han mostrado un esfuerzo importante para poder desacelerar los componentes de esos pagos. Ahí se incluye el incremento por costo de vida, pero hay otros componentes como los tiempos extraordinarios y variables similares, donde hubo muchos esfuerzos de contención” aseguró.