El Gobierno aseguró que pagará un monto aproximado de ¢1.450.000 a cada empresa que contrate a un trabajador en condición vulnerable.
El programa "Mi Primer Empleo" pretende generar 30.000 nuevos puestos, lo que significa para el primer poder tener que desembolsar la suma de ¢43.580 a lo largo de tres años, tiempo estimado en que se logrará la colocación total de los nuevos empleos.
Víctor Morales, ministro de Trabajo explicó que por población vulnerable se entiende a personas jóvenes de entre 18 y 35 años, mujeres de cualquier edad y personas con discapacidad que buscan empleo.
Según cifras del Instituto nacional de Estadísticas y Censos (INEC), la tasas de desempleo abierto en este último público meta alcanza el 70% a nivel nacional.
"La iniciativa se entiende como un beneficio económico que el Estado otorgará a las empresas para que aumenten su planilla y le permitan a las poblaciones más afectadas por el desempleo ubicarse en el mercado laboral", comentó Morales.
Los fondos del programa corresponden a dineros girados por instituciones centralizadas que registran superávits en sus presupuestos.
En operación
El beneficio que se otorgará a cada empresa, por cada trabajador contratado, se realizará en dos tractos: el primero a los seis meses de la contratación y el segundo a los 12 meses.
Para ello, la compañía contratante y el Ministerio de Trabajo deberán firmar un contrato donde se compromentan a mantener ese trabajador al menos por un año.
Las empresas interesadas no podrán contratar a más de 20 empleados bajo el programa.
Al mismo tiempo, las empreras que desean ser parte del programa, y las personas que quisieran ser candidatos elegibles, tendrán que inscribirse en la dirección www.miprimerempleo.cr .
El programa espera que bajo esta modalidad se contraten 30.000 personas en un periodo de tres años lo que implica una colocación anual de al menos 10.000 personas.